jueves, 14 de julio de 2011

Bastedades ...

    Como poder dormir con esta lluvia? Eso me preguntabas todas las noches lluviosas que pasamos juntos, nunca entendí ese miedo infantil...

   Entenderte o pretender hacerlo era tan absurdo como conseguirlo, nunca logré razones ni conceptos subjetivos de esos de los cuales entiendo perfectamente, tan hábilmente que nadie lo notaría, en lugar de eso decidí caminarte, reconocerte como tuya y de nadie más ni siquiera mía, acompañarte en tu farsa basta y sutil, eterna y profunda, imperecedera, sin fecha de caducidad, pero mi caducidad tiene tu nombre que injusta la vida, que estúpida diría también.

    Los dos nos hicimos viejos pero sin arrugas ni cabellos plateados, nos hicimos viejos pero no de la cáscara, mas bien del interior, del fondo, del concepto en sí del ser humano, nos fuimos haciendo pequeños, necios, sucios, absurdos, locos, enfermos, hediondos, llenos de terquedad y discusiones, los dos siempre teníamos la razón, nadie cedió ni antes ni ahora, ese orgullo ancestral del que tanto me hablo mi padre quirúrgico por fin estaba pasando factura y cobrando intereses por los años pasados y futuros.

    Ahora nos veo como una fotografía pasada, no antigua, ni vieja, simplemente una fotografía pasada, pasada por años, por lágrimas, por risas, pero sobre todo pasada por dos instantes de vida que se vuelven inciertos, fugaces e indistinguibles de lo irreal, cuando eso sucede recurro a la fotografía como muestra objetiva de que en nuestras vidas al menos por un instante tuvimos una historia.

2 comentarios:

  1. Cuanta razón tienes cuando dices que es absurdo pretender entender a tu pareja y yo diría que es aun más absurdo intentar lograr que te entienda y no es que sea un imposible, simplemente que al ser dos personas distintas jamás se podrá pensar igual que la otra, tal vez se logren acuerdos o coincidencias en los pensamientos o inclusive como en mi caso llegar a fingir en opiniones que no son propias y que indiscutiblemente tarde o temprano derrumbaran lo vanamente construido, y no por malicia si no más bien por seguir en una lucha incesante entre lo que se tiene y lo que se desea.
    Tan sencillo que es el respetar los pensamientos ajenos, aun y cuando no se compartan, los seres humanos nacemos libres, y es una tristeza que nosotros mismos nos vayamos atando a cadenas que son muy difíciles de quitar (permitir que te controlen en el horario, las amistades, la vestimenta, la forma de hablar, de actuar, de pensar, en pocas palabras dejar de ser tu mismo), y lo peor que a pesar del daño que provocan no siempre se pueda ser lo suficientemente valiente para liberarse por voluntad propia.
    Jorge me gusta mucho tu blog porque igual y lo que escribes esta encaminado sobre una línea diferente pero como alguna vez me lo dijiste cada cual lo percibe de acuerdo a lo que esta viviendo, y a mi siempre me deja algo, esa espinita en mi cabeza que indiscutiblemente me atrevo a confesarte me ha ayudado a tomar decisiones importantes, gracias por compartir esto que es tan tuyo, saludos

    ResponderEliminar
  2. Hola MS muchas gracias por tus comentarios, y tienes toda la razón, estamos en una inacabable lucha de género, equidad, respeto, fidelidad, todas ellas ironías mezcladas con realidades, lo interesante es saber distinguir los momentos precisos para distinguir, porque para todo hay tiempo menos para no tomar decisiones.
    Saludos

    ResponderEliminar