martes, 4 de octubre de 2011

De muerte y poesía !

      Decía Hemingway que aquel que tiene miedo a la muerte no es capaz de vivir a plenitud y bien, pues creo que no hay que darle la vuelta a esas palabras.

      Muchos conocemos a personas muertas en vida, y es que en realidad no nos enseñan a vivir a plenitud, nos dan breves instrucciones a cerca de como funcionar en la sociedad o ante un grupo de amigos, nos enseñan que debemos conocer todo el manual de buenos modales y correspondencia social, pero en realidad eso es vivir? por supuesto que nos ayuda a tener un comportamiento racional, pero en realidad es la clave para VIVIR? sinceramente yo creo que no, creo que la vida no se puede limitar por reglas o normas, mucho menos estándares sociales o etiquetas, aun cuando haya tanta individualidad dentro de ellas.

     La vida no es un concepto, es aquello que en las mañanas o en las noches llenas de dudas te permite salir adelante, es lo que seca las lágrimas de dolor y enjuga las de alegría, sería bastante pretencioso tratar de explicar más, pues es realmente algo tan subjetivo como la muerte misma.

     Las tardes opalecentes perecen todos los días y se reinventan en colores tristes de ocasos memorables que ante nuestras miradas atónitas y asustadas simulan la eternidad, caen llantos profundos y grises a la tierra húmeda de lo mismo, mojada y callada sin respeto, sin piedad y con la dignidad barata, de tus labios que matan tan suavemente que duele, asfixia, encanta y silencia las dudas de su inquieta vulnerabilidad.

     Las cosas tienen caducidad y edad, es algo innato, heredado y obligatorio, por definición tienen fin, el cual llega tarde o temprano o ambas de acuerdo al contexto individual, siempre sorpresivo y tajante, inclemente y salvaje, nos arrebata el aliento infinito y sutil, nos mata del modo menos mortal, toma la vida en brebajes amargos y ácidos, la toma y la destruye sin posibilidad alguna de reconstrucción.

      La reflexión evidente, la conciencia que no calla, no enmudece ante la objetividad de una idea plasmada tan plácidamente que convence con premura y seguridad, la dispersión de ideas muere y dicta con la lógica certera y objetiva que ese miedo es inútil, frágil y sin sentido, que es mejor no pensar en ello pero sin perderlo de vista


1 comentario:

  1. La vida una constante ante la sociedad, que la gente que realmente disfruta de ella la convierte en una singular variable, encontrándole distintos matices que le permiten ser uno mismo sin intentar vivir como los demás o inclusive por los demás, sin tabúes que envuelven en una abrumadora línea recta sin desvíos y que muy difícilmente todos somos capaces de experimentar.
    El ser humano tan lleno de dudas, estando rodeado de gente y aun así sentirse completamente solo, estando muerto en vida por las ataduras que le aquejan a su corazón, hace unos días me entere que un familiar no muy cercano pero que en algún momento si lo llegue a frecuentar le externo a su madre que se sentía completamente solo, ella no le dio importancia a sus palabras, pocos días después lo hallaron en su habitación… se había quitado la vida!!!!, como puede una persona sentirse sola cuando casi la tercera parte del pueblo compartía con él un mismo apellido? Fue la primer pregunta que me hice al conocer los motivos de su deceso, después de una cuantas charlas comprendí que la mayoría de los motivos fueron precisamente por los roles que desempeñamos cada uno en nuestra sociedad, para mi fue algo impactante porque desde luego tengo la idea de que cada uno de nosotros puede hacer la diferencia en nuestro entorno y que tal vez una palabra bien o mal dicha en un momento crucial en definitiva dejara huella para quien la recibe.
    Yo si le tenía miedo a la muerte aun y que mi Fe me dicta que una vida mejor me espera, hoy por hoy sé que es inevitable y aunque es definitivamente consternante enfrentarla, comprendo que todo es parte de un ciclo, por lo pronto yo sigo intentando romper con mis propios paradigmas generados a través del tiempo los cuales están fundamentados en tabúes, estoy aprendiendo a conservar los necesario y a desechar los incongruentes, como una lucha constante entre el querer ser, y el deber ser pero lo mejor de todo durante esa lucha intentando ser feliz...
    No se si es a lo que te referías, solo sé que es lo que me transmitiste… Gracias por escribir

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